Flaco metámonos al baño, que ese traje de enfermero me la pone dura... Sí, cuando nadie nos vea entramos a aquel baño público por separado, nos encerrados en un privado y pasamos un buen rato.

Vos entras primero, al rato entro yo. Con una seña de cabeza me sigues al privado del final y me enseñas esas nalguitas.

Vos entras primero, al rato entro yo. Con una seña de cabeza me sigues al privado del final y me enseñas esas nalguitas.
Cuando me beses con ese aliento fresco mi picha estará esperando a que apresuradamente la agarres con tus manos nuevas y yo meteré mis manos entre tu pantalón con cintura de elástico para poder tocar ese trofeo que tienes entre las piernas.
Tu dedos ensalivados jugarán con mi ano tibio y me tocaras con gentileza en cada movimiento.
Mordiendo tus nalgas pequeñas pero duras me harás venirme gimiendo en silencio. Me dirás al oído que deseas que te ruegue por tu semen y yo sumisamente pediré entre besos ese juguito blanco.
Limpiarás con papel higiénico la tasa que quedará llena de nuestro semen y entre susurros me pedirás que me vaya pues es peligroso que nos descubran.
Mordiendo tus nalgas pequeñas pero duras me harás venirme gimiendo en silencio. Me dirás al oído que deseas que te ruegue por tu semen y yo sumisamente pediré entre besos ese juguito blanco.
Limpiarás con papel higiénico la tasa que quedará llena de nuestro semen y entre susurros me pedirás que me vaya pues es peligroso que nos descubran.