y el resto del día no me acuerdo de ellos.
Muy simple, cada mañana descargo 5 minutos de odio contra aquel o aquella de turno, ese o esa que le dio vueltas a mis huevos durante el día anterior con la intención de hacerme pasar un mal rato.
5 minutos bastan y el resto del día no me acuerdo de esa persona.
No merecen más de 5 minutos aquellos que creen que el mundo gira a su alrededor.
Esos que no respetan la felicidad de los demás y tratan de ensuciarla con su inmundicia.
Esos que están ahí para apuntar con el dedo y no ven la mierda que cargan.
Esos que llaman amistad a cualquier piltrafa sólo por soledad.
Esos que no se quieren y odian al mundo y el mundo les devuelve el sentimiento.
A esos hay que odiarlos 5 minutos y olvidarlos al instante y quizá para siempre.
Algún día les tendré compasión, por el momento a vivir que ya pasaron sus 5 minutos.
2 comentarios:
no entendí la idea
¿es descargar tu amargura/frustración a alguien en particualar?
o es recordale a fulano donde es que esta
no. no entendí
Claro que entendiste Miguel, es recordarle al fulano y a uno mismo cómo es que son las cosas, pero hacerlo de una, de inmediato y ya luego vivir felices.
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