mayo 31, 2013

El periodista y yo

Soñé que tenía una aventura romantica (sexual seamos claros) con un reconocido periodista televisivo, el señor se dejó esta semana la barba y ese detalle es el que lo hace verse especialmente interesante.
 
Lo que me llamó la atención del sueño es que ambos, él y yo, sabíamos que estabamos siendo infieles a nuestras respectivas parejas y aún así continuabamos en nuestra muy buena faena.
 
Recuerdo claramente cómo tocaba unas nalgas duras como piedras y su piel parecía de caramelo recien preparado.  Nos abrzabamos fuerte y nos besabamos con desesperación, su respiración sobre mi cuerpo delataba su urgencia y mi necesidad de sentirlo por todo mi ser.
 
Desperté muy exitado y con ganas de verlo... encendí la tv, busqué las noticias de la mañana y ahí estaba él... radiante.
 
Se que fue un sueño, pero hasta el momento mueve tooooooooooooooodas las hormonas de mi cuerpecito cuando escucho su voz.

mayo 29, 2013

Angelito (para un final)

Recordé esto despues de leer "Sal del Closet Parte I, Gusto en conocerte" de Valiente solo en palabras.
 
Cada noche desde que empezamos a ser novios hablabamos un rato.  Si nos habíamos visto, para contarnos que habíamos llegado bien a casa de cada cual. Si no nos habíamos visto, entonces para contarnos los pormenores de día o para hacer planes para el dia siguiente.
 
Antes de terminar la llamada él me decía:
 
"Que sueñe con los angelitos, que diosito me lo acompañe"
 
Era para mí como una muestra de cariño.
 
Cierto día terminamos la conversación y no me dijo nada. Lo llamé para recordarle que le había hecho falta algo.  Y me gritó que él no tenía la responsabilidad de decirme esas idioteces todas las noches.
 
Me partió el corazón en un gesto de esos que indican que algo está terminando...
 

mayo 07, 2013

Un viaje poco usual

Martes
 
6:45a.m.
 
Salgo a tomar el autobús pues es el día en que me corresponde la restricción vehicular. Subo al bus que me llevará desde mi casa hasta ell centro de San José.  A través de mis lentes oscuros no podrán ver que voy dormido, bueno hasta que se sienta a mi lado un tipo gordo que casi me saca del asiento.
 
El pendejo del asiento del frente se pone sus audifónos y le da play a una escándalo de baterias que tardan todo el viaje.
 
7:15a.m.
 
Bajo de mi bus y me dirijo a la parada de Sabana Estadio, en mi usual desconexión con el mundo me doy cuenta que el chofer está ya por salir de la parada y como no sé los horarios es probable que llegara tarde al trabajo, así que me planto en la puerta y le pregunto si va para la Caja.
 
Abordo el bus y pago con una moneda de ¢500, el chofer me hace cara de amargado y tarda en darme el vuelto, en el primer asiento va bien acomodado un señor algo mayor, ya peinaba algunas canas, el doncito está aún de buen ver, se acomoda al fondo del asiento y me cede un espacio.
 
El señor empieza a acomodar su maletín en sus piernas y lo deja de manera que yo pueda ver la jareta de su pantalón, yo hago lo mismo y me acaricio por encima del pantalón que para ese momento deja ver mi exitación.
 
El viaje es corto pero debido al tráfico usual del centro tardamos aproximadamente 25 minutos en esos tres kilometros.  En cada parada que hace el autobús el señor se recompone, quita su mano de mi pierna y se sienta derechito.  Para segundos después acomodar el maletín de nuevo y poner su mano sobre mi picha caliente.
 
Unas cuadras más arriba el señor me masturba en el primer asiento del bus, el autobús va repleto, él un poco canoso y de tez blanca, yo pelón y de piel broceada... Llegamos a la parada del Teatro Nacional. Aquí ambos hacemos a bajarnos del bus y el molote de gente nos impide salir así que el señor se levanta y pasa casi por sobre mis piernas.
 
Se coloca dando campo a que la gente baje, pero mi pierna izquierda queda en medio de sus piernas y con estas me da apretones a lo largo de mi pierna. Se baja, me bajo de último. Caminamos un poco y en media Plaza de la Cultura le digo cerca de su oído "oiga me trae todo templado" a lo que él responde "sí, fue un viaje poco usual"
 
8:15, llegué tarde a trabajar, adivinen porqué.