Con la corriente, sólamente dejándose llevar.

Si así fluyendo. Las últimas semanas han sido duras (ya sé que canso) y ese mismo pensar en lo que sucedió, en si fue un error, en si es necesario volver a ver hacia atrás, de qué valen las luchas, qué cambia cuando uno decide hacer las cosas de la manera correcta, entonces analizo más o menos así:

1. Me educaron mal, me enseñaron que uno debe ser honesto en su trabajo.
2. La educación de los demás fue deficiente, sus sobreprotectores padres tienen una venda en los ojos.
3. He vivido engañado y las luchas por hacer las cosas bien no siempre son recompensadas.
4. Estoy harto de mi trabajo y no puedo renunciar por culpa de esta crisis económica de mierda.
5. Me gustaría tener mi propio negocio y no depender de nadie para tomar desiciones.

Y me siento vacío, incomprendido, buscandoalgoquenosemeperdió, cansado, aburrido.

¿Será que cuando uno pasa los treinta se va dando cuenta de que la vida no era como se la pintaban?

Yo sé, me pongo existencialista, creo que es tanta húmedad.