Dignamente...

Pues si, uno debe aceptar que debe retirarse en algún momento y yo creo que el mío ha llegado.

Y aúnque como muchos digo que escribo para mí, que no necesito que nadie me lea y que si de alguna manera alguien se interesa por pasar, leer y luego comentar o no, todo es ganancia, pero no, no es cierto, uno como bloguero quiere que se le lea, que se le comente, que alguien te diga después de alguna ausencia un "dónde estabas?, te extrañabamos". Encontrar que al abrir tu correo por la mañana alguien se tomó dos segundos de su tiempo para comentar al menos un excelente post, este post es una mierda, me aburres tremendamente. Y como los años no pasan en vano y uno se va poniendo delicado, a apenas un año de haber empezado esta aventura blogueril me despido, si claro, me despido, siento que aunque no he dicho todo lo que podía decir y que dentro de mí llevo muchos consejos, sugerencias, ideas y cosas que compartir, al mundo es muy probable que no le interese y que por tanto tengo la explicación muy clarita de porque hace mucho tiempo no recibo comentarios de casi nadie.

Agradezco a los pocos blogueros que han sido tan amables de pasar a dejar un comentario, bloqueros que podría contar con los dedos de una mano. Blogueros a los que sigo y que encuentro interesantes.

También creo que llegué a mi término pues encuentro que la mayoría de los blogs, con contadas excepciones, me cansan, me aburren y me dejan un sinsabor.

Durante este año diariamente he leído al rededor de 40 o 50 posts a los cuales la mayoría de las veces les he dejado comentarios externándoles mis ideas respecto a sus escritos y es probable que eso haya llenado el círculo y que por tanto ya no quiera escribir más.

En algun momento apareceré por ahí con otras ideas, otros cuentos y otras anécdotas.

Por el momento gracias.